Mitos y verdades del deporte y la Diabetes

Hoy os presento una pequeña recopilación de verdades y mentiras con las que nos encontramos los diabéticos a la hora de realizar algún deporte.

1.- Es posible controlar la diabetes solo con deporte: FALSO. Aunque es cierto que el deporte «quema» azúcar, sin la insulina es imposible que la glucosa entre a las células, por lo que estas no pueden realizar correctamente su función. La práctica deportiva es un aliado fundamental, pero no puede ser el único tratamiento.

2.- Hay deportes que no pueden ser practicados por diabéticos: FALSO. No hay ningún deporte que una persona con diabetes no pueda practicar, es más una cuestión de control de la enfermedad. Una disciplina deportiva que implique mayor intensidad o riesgos no tiene porque estar vetada para una persona con un buen conocimiento de su diabetes. Podemos decir que lo único que está contraindicado para practicar determinados deportes es un mal control de la diabetes.

3.- El ejercicio potencia el efecto de la insulina: VERDAD. La actividad física aumenta la sensibilidad del cuerpo a la insulina, haciendo que con una dosis menor de esta nuestro cuerpo “queme” más glucosa. Es muy importante ir aprendiendo cómo respondemos al deporte para así ir ajustando correctamente las dosis sin correr riesgo de hipoglucemia.

4.- Los deportistas con diabetes no pueden competir a alto nivel: FALSO. Cada vez son más y más las historias que se están dando a conocer de deportistas diabéticos en todas las disciplinas y niveles competitivos. Triatletas, nadadores, futbolistas, ciclistas… algunos de ellos incluso olímpicos. Ser diabético supone un esfuerzo «extra» a la hora de controlar la enfermedad, pero no es ningún impedimento para rendir al más alto nivel.

5.- El ejercicio ideal para un diabético es el larga duración de intensidad moderada (aerobico): VERDAD. Aunque el hecho de ser diabéticos no nos cierre puertas a determinadas prácticas deportivas, si es cierto que hay unos deportes más beneficiosos que otros. Una hora de carrera suave, bici o natación es mucho más beneficiosa que un entrenamiento de fuerza en el gimnasio o correr 100 metros lisos. Esto es debido a que al prolongar un ejercicio de intensidad media, nuestro cuerpo quema más glucosa y los efectos beneficiosos del mismo para la diabetes se prolongan durante más tiempo una vez hemos terminado la práctica deportiva.

6.- La insulina es dopaje: FALSO. Es cierto que existen determinadas disciplinas como el culturismo donde personas que no tienen diabetes pueden emplear esta hormona como «dopping» junto con esteroides, ya que la insulina tiene un efecto anticatabólico (evita la destrucción de tejidos). Sin embargo, un diabético por el mero hecho de inyectarse insulina no parte con ningún tipo de ventaja respecto a otros deportistas que no lo sean.

7.- Los diabéticos deben poner más precauciones para evitar lesiones: VERDADERO. Las personas con diabetes solemos tener problemas de cicatrización, de cierre de tejidos y sobre todo somos más propensos a padecer lesiones crónicas en los pies, que pueden derivar en amputaciones si no los cuidamos correctamente, por ello es muy importante cuidar aspectos como la higiene en los pies, el calzado, limpiar correctamente las heridas… Además, una lesión que nos aparte de nuestra rutina deportiva hará que nuestra diabetes se “descontrole” ya que no podremos seguir practicando. ¡Hay que cuidarse!